“El gobernador confirmó que va a seguir manteniendo el subsidio que le venía dando al transporte. Lo que falta ver es de qué manera se va a aplicar el descuento de la tarifa social en las tarjetas SUBE, que el gobierno nacional todavía no terminó de definir”, señaló.

Y agregó que el aumento es inevitable y que “las empresas coinciden en que el precio del boleto está desfasado”, por lo cual solicitan “una actualización del valor”. El funcionario provincial expresó que la demanda “es valedera” y que “es una realidad que el boleto va a sufrir un aumento”, dados los últimos incrementos inflacionarios.

“Lo que vamos a hacer es tratar de simplificar los componentes para medir el índice de cuánto vale a cada pasajero el boleto. Queremos simplificarlo al valor del combustible, de los neumáticos y de la paritaria según UTA. En base a eso vamos a hacer una polinómica donde vaya el aumento del colectivo. Estamos todos de acuerdo en que hoy el boleto tiene que estar entre los 400 y 450 pesos.

Ese es el valor que se mantendría con el subsidio provincial, muy lejos de los mil pesos”, explicó el funcionario. Aclaró también, que el gobernador Rogelio Frigerio “pidió no establecer un monto fijo para la provincia, pero sí un monto tope, que sería de 700 pesos. La única ciudad que podría aplicar a eso sería Paraná, por las distancias y la realidad que tiene con los diferentes sindicatos y los tramos que cobra”, adelantó.

En este contexto, el jefe de Gabinete explicó que hay ciudades de menos de 50 mil habitantes a las que le resultaría muy complicado subir el boleto a una cifra excesivamente alta “porque los empresarios aseguran que caería notablemente la cantidad de usuarios”.

Consultado sobre la fecha estimada en la que comiencen a aplicarse los nuevos valores, Garro estimó que “seguramente hasta la primera o segunda semana de marzo no habrá novedades sobre el aumento o no se puedan concretar”. Garro dio a conocer además que el tope en la provincia sería 700 pesos para la ciudad de Paraná.