El gremio docente dispuso las medidas de fuerza en el Congreso del jueves 19 de septiembre para exigir al gobierno de Entre Ríos una pauta salarial que “repare la pérdida de poder adquisitivo de las y los trabajadores de la educación”. Las resoluciones se tomaron cuando terminaba la conciliación obligatoria judicial que forzó el dictado ininterrumpido de clases en la provincia durante cerca de un mes.

Cabe señalar recordar que la semana pasada, el martes, el gobierno de la provincia trató de desactivar las huelgas con el anuncio de un nuevo esquema salarial, en una conferencia de prensa que encabezó el propio gobernador Rogelio Frigerio. También abordó el tema de la arquitectura que tendrá el sueldo docente en la próxima liquidación, el mandatario indicó que se aplicará un mecanismo de “Declaración Jurada” para monitorear los días efectivamente trabajados por cada agente en las escuelas. “Vamos descontar los días de paro porque esta discusión no puede tener de rehenes a los alumnos”, señaló oportunamente Frigerio.

AGMER respondió ante el anuncio con la ratificación de las 48 horas de paro de la semana pasada y la denuncia de “prácticas persecutorias” a quienes adhieran a la huelga. “El gobierno pone tiempos, recursos, dispositivos, energía y creatividad no en mejorar los salarios docentes sino en ajustar y perseguir”, fundamentó el gremio en un comunicado.

Por su parte el gobierno provincial confirmó este lunes, en vísperas de la nueva tanda de paros, la creación del nuevo Fondo Provincial de Incentivo Docente (Fopid) que suplirá el monto eliminado por la administración nacional.

De acuerdo a la información oficial, un docente con una carga semanal de 20 horas recibirá 33.200 pesos por este concepto, más 24.800 pesos por Conectividad. Y un maestro que trabaja jornada completa cobrará 66.400 más 49.600 pesos por esos ítems. Un total adicional de 116.000.

El decreto del Ejecutivo ratifica también, los demás componentes de la última oferta salarial, que se implementa por decreto del gobernador: un incremento de 2,183 por ciento (cada mes) para octubre, noviembre y diciembre; una cláusula que ata los sueldos desde octubre hasta diciembre a la inflación oficial del mes anterior; y otra que ajusta el sueldo mínimo docente en la provincia por lo menos 10 por ciento encima de la canasta básica alimentaria que mide el INDEC.