Familiares del muchacho desaparecido reconocieron los elementos encontrados y secuestrados después de la intervención policial.

Se confirmó que se trata de alrededor de 50 restos óseos, entre ellos, un cráneo, vértebras, costillas y extremidades, que fueron secuestrados y puestos en resguardo por parte de personal de Criminalística para su posterior entrega al Laboratorio de Osteología Forense e Identificación Humana, para su análisis.

El caso quedó en manos de la fiscal de Colón, Micela Di Pretoro, que dispuso las medidas para tratar de determinar fehacientemente la identidad de la persona a quien pertenecerían los restos óseos.

Tras el hallazgo de los restos, se encontraron diversos elementos, entre estos una mochila y una campera, las cuales fueron exhibidas a la madre del joven desaparecido, quien los reconoció con total seguridad.

De igual manera, la fiscalía dispuso que los restos sean peritados para confirmar que estos corresponden a Juan Ramón y tratar de determinar las causas de la muerte.

Juan Ramón Maciel, de 22 años, fue visto por última vez en horas de la mañana del miércoles 17 de enero, momento en el cual se retiró de su domicilio en la localidad de Ubajay, en el departamento Colón.

El mismo es de contextura delgada, de tez morena, cabello corto y tiene un tatuaje en el cuello lado izquierdo, labio leporino, no precisar al momento de ausentarse las vestimentas que llevaba puesta.

Durante la investigación por su reaparición, una de las hipótesis que surgió fue que Maciel huía de los policías que se le acercaban porque tenía pedido de captura luego de la denuncia de su madre por hechos de violencia. Otra hipótesis, abonada por supuestos problemas depresivos del muchacho, era que haya tomado la decisión