Judiciales y Policiales
“Empresa” criminal

Procesaron a la pareja instalada en San Benito que vendía cocaína traída de Buenos Aires en ciudades locales

El juez federal de Paraná Leandro Ríos procesó con prisión preventiva a la pareja y a una colaboradora, mientras que para otros dos implicados dictó la falta de mérito.

El juez federal Leandro Ríos procesó con prisión preventiva a Andrea Vargas y Néstor Rodríguez Sanabria por constituir una asociación criminal dedicada a la venta de cocaína. El magistrado les trabó embargos millonarios. Además, una cómplice quedó detenida.

Andrea Vargas y Néstor Rodríguez Sanabria manejaban desde San Benito una verdadera “empresa” criminal dedicada a la venta de drogas en las ciudades entrerrianas de Paraná y Concordia y en las bonaerenses de Lanús, Campana y Lomas de Zamora. El juez federal de Paraná Leandro Ríos procesó con prisión preventiva a la pareja y a una colaboradora, mientras que para otros dos implicados dictó la falta de mérito.

El juez Ríos argumentó la decisión en 44 páginas, sobre el accionar delictivo de cada uno de los implicados y el funcionamiento de la organización que adquiría cocaína y la distribuía en distintas bocas de expendio en Paraná.

Para el magistrado, tanto Vargas como el paraguayo Rodríguez Sanabria son los cabecillas de la organización. Debido a esto los responsabilizó del delito de organización de actividades de comercio de estupefacientes en concurso real con el delito de resistencia a la autoridad.

En tanto Tamara Blanco fue considerada autora del delito de comercio de estupefacientes, agravado por haber intervenido en el hecho tres o más personas de manera organizada. Para estas tres personas dispuso la continuidad de la prisión preventiva en las unidades penales 1 y 6 de Paraná y les trabó embargo sobre bienes libres de los dos primeros por 9.360.000 de pesos cada uno y de 7.020.000 a Blanco.

El Juzgado dictó la falta de mérito de Agustín Cáceres y Tomás Jacobi, disponiendo su inmediata libertad, sin perjuicio de la prosecución de la causa, y les impuso asistir al Juzgado cada vez que le sea requerida su presencia, como asimismo informar en caso de cambiar o ausentarse de su domicilio por un término mayor a 72 horas; caso contrario, se ordenará su inmediata detención.

Cáceres es considerado colaborador; específicamente, guardaba la droga. En tanto que Jacobi es un cambista de dólares, lo acusan de financiar a la organización delictiva que comenzó a ser investigada en abril de 2024.

La organización delictiva tenía algunos puntos de venta que fueron investigados y chequeados por la Policía con registros fílmicos en barrio Paraná XVI, El Sol, en calle Patagonia y en Villa Almendral en Paraná. Además comercializaban en San Benito y Concordia.

La banda venía siendo seguida desde abril de 2024 y terminó desbaratada el 19 de diciembre del pasado año cuando la pareja Vargas-Rodríguez Sanabria cayó con 18 kilos de cocaína en la zona de Victoria tras escapar de un operativo policial.

La empresa

Vargas, de 43 años, se presentó como comerciante. Está imputada como organizadora transportadora. Su pareja, Rodríguez Sanabria, tiene 29 años y dijo que trabaja en la construcción. El juez lo consideró el organizador-transportista; y Tamara Araceli Blanco, de 28 años, dijo que es comerciante, nacida en Paraná, y está imputada como vendedora en el barrio Paraná XVI.

Jacobi, de 26 años, cambista habilitado de divisas y compra de oro en un negocio de Concordia, fumigador, quien también se dedica a la compra y venta de automotores, de nacionalidad argentina, nacido en Concordia, está sospechado como financista colaborador, y Agustín Alejandro Cáceres, de 34 años, comerciante, nacido en Paraná, lo fue como colaborador que manejaba contactos y guardaba droga en calle Caputo.

Jacobi dice ser inocente. Tras permanecer detenido, finalmente recuperó la libertad. Fue el único en declarar. Contó que la pareja le compraba entre 8.000 y 10.000 dólares cada vez que iban a Concordia. Señaló que se presentaron como productores ganaderos. Aseguró que les vendió un auto para la hija, y agregó que no tiene nada que ver con ellos.

A los cinco se les atribuyó “que, al menos entre el 15 de abril de 2024 hasta el día 19 de diciembre de 2024, fecha en que se ejecutaron los diversos allanamientos, interceptación vehicular y registros de morada, detenciones, órdenes de secuestros, requisas personales, dispuestas por el Juzgado Federal 1 de Paraná y otras personas aún no identificadas y/o localizadas que se encontraban a cargo de la venta del narcótico, comercializaron de manera conjunta y organizada, sustancias estupefacientes –clorhidrato de cocaína– desde distintos domicilios y/o residencias situadas en Paraná, sustancia que era transportada desde Buenos Aires hasta Paraná”.

Lectores: 96

Envianos tu comentario

Nombre:
Correo electrónico :
Comentario: